¿Te has imaginado alguna vez viviendo lejos de la gran ciudad, del ruido y del estrés? Si te frena todo el largo proceso que lleva una construcción de casa tradicional, podrías plantearte hacerte una casa prefabricada. Se construye en la mitad de tiempo y creemé con menos de la mitad de los problemas que una obra tradicional. Lo bueno, es que además, las casas prefabricadas ofrecen las mismas comodidades que las casas de obra, y necesitan un gasto energético mucho menor. No en vano, su demanda se ha triplicado en los últimos años en nuestro país.
Quizá en España las más conocidas sean las casas prefabricadas de madera, que si bien son una opción excelente, por su estética, confort y coste, no son la única que existe. Están las casas prefabricadas de acero, ideales por su diseño moderno y porque apenas necesitan mantenimiento, las de hormigón, construidas a partir de bloques de hormigón, también muy durarederas y que apenas requieren mantenimiento e incluso las casas hechas a partir de contenedores martímos o contenedores de carga. La mayor ventaja de este último tipo de construcción es el precio, son muy económicas y permiten diversidad de diseños muy modernos.
Creo que la sensación de vivir cerca de la naturaleza, el poder disfrutar de un espacio de terreno para tí solo, en donde poder salir a desconectar y respirar el aire puro, no tiene precio. Una casa prefabricada te da la opción de construir tu propio hogar en menos tiempo y menos coste y, lo que es mejor, son casas que no requieren tanto mantenimiento y son más eficientes energéticamente. Es el futuro.
Pienso que en un futuro, no muy lejano, toda la población ya no trabajará en oficinas hacinados, con un horario rígido, sino que trabajarán por cuenta autónoma, desde su casa o desde el lugar que prefieran.Resulta evidente, la tecnología ha revolucionado nuestra capacidad de realizar todo tipo de tareas. Ahora podemos enviar y recibir correos electrónicos desde cualquier lugar, participar en reuniones, por video conferencia, convocadas en el otro extremo del mundo. Podemos acceder a toda la documentación de nuestra «oficina» sin necesidad de acercarnos a ella y estar al día de los últimos avances en nuestro campo sin tener que asistir a reuniones interminables. Sinceramente, se me ocurren pocos lugares mejor para trabajar que desde mi casa cerca del campo y poder estar junto a mi familia.
Existe una alternativa al pisito de 80 m2 de la gran ciudad y es una casa el doble de grande con jardín y mayor tranquilidad.